La «Ciudad de la Esperanza», renace tras haber pasado por las manos del párroco Fernando Giacomucci, quien la fundó y que dejó el cargo al sacerdote Vicente Aparicio, fundador y director de la Asociación de Padres de Discapacitados Psíquicos (Aspadis). En la actualidad, las instalaciones de la asociación en Aldaia acogen y dan formación a un total de 135 personas sin hogar y con escasos recursos, que trabajan en diferentes talleres, como los de imprenta, manualidades y empaquetado, entre otros, y asisten a cursos de castellano, geografía, matemáticas y asesoramiento jurídico-laboral.
La Fundación realizó una donación de 10.000€ para ayudar económicamente a que el Proyecto funcione y las personas allí acogidas se formen y trabajen, puedan incorporarse al mundo laboral.